viernes, 12 de agosto de 2016

Yo daría hasta mi sueño por ver la farsa fallar... ♪

No venderme es lo que soy. Aunque me duela, aunque venderse sea más fácil. Porque venderse es más fácil. No optar nunca por lo fácil es lo que soy. Odiar la hipocresía, odiar a los mediocres, negarme a respetarlos. Esforzarme es lo que soy, estoy hecha de la más pura autoexigencia. Pero cuando vale, ¿sabés? Cuando la valoran, cuando me merecen. Pasé demasiado tiempo de mi vida perdiendo tiempo y ganas en gente e instituciones que nunca lo valoraban. No quiero volver a eso. Si de algo estoy segura es de que no quiero volver a eso. No dudes entonces, si lo sabés, no vuelvas a eso. Si lo sabés, entonces, no te quedes en eso. Andate, correte a un costado, peleá contra vos. Porque dejar de exigirme me cuesta aún cuando nadie lo merece. Aunque no valga la pena, por mucho tiempo, yo doy igual. Doy todo siempre, ¿no es eso lo que soy? Dar mucho más de lo que es estrictamente necesario. Pero desde mí, no precisamente desde lo que me piden. No cambio por nadie, ser real es lo que soy. La verdad como valor más absoluto. Verdad. Belleza. Arte. Amor. ¿En ese orden? No sé. Tal vez todos juntos, lo que soy. Lo que quiero ser. Quiero ser mi promedio, porque lo merezco, porque es la prueba que no le importa a nadie de que yo soy yo. No quiero ser la alumna ideal de la gente que triunfó sin merecerlo. Soy alumna ideal de mis maestros, de los que trabajaron siempre, de los apasionados que siempre lo dan todo aún cuando casi nunca reciben nada. De ellos sí, puedo aceptar la crítica siempre. Cuando mi profesora de danza me grita "¡HORRIBLE, eso fue un horror, andá y hacelo de nuevo!", yo sé que fue horrible, yo sé que fue un horror, yo voy y lo hago de nuevo. Y de nuevo, y otra vez, hasta que salga, hasta que ella como yo crea que sale. Cuando ella me pregunta si me molesta no bailar en una coreo en la que prefiere poner a otra gente, le digo que está bien. Porque sé que hay algo que me falta para merecer ese lugar, y de la misma forma puedo estar segura de que me lo gané cuando me dice que voy a ser una de las únicas tres solistas, que voy a abrir la coreo yo. Cuando me dice que bailé hermoso, increíble, sé que se refiere a mí. Cuando ella me ve soy yo, y bailé horrible, o bailé hermoso, pero siendo yo. Y cuando mis profesores de dibujo -los de verdad, los que saben, los que enseñan- me dicen que lo pude haber hecho mejor, sé que tienen razón. Sé que no di todo, y me avergüenza, y entonces doy más. Dar todo es lo que soy. Pero cuando vale, ¿sabés?. No quiero quedarme acá. No quiero que mi nota diga que no di todo cuando sé que lo hice, porque lo único que no di es la venta de mi esencia. La verdad ante todo, ¿sabés?, la mediocridad nunca. ¿Y soy feliz así? No. Casi nunca al menos. Casi siempre estoy enferma. Pero las veces, las pocas  veces en las que ser así me lleva a ser feliz... es esa la felicidad que hace girar al mundo, el único tipo de alegría que lo mantiene en su eje y resistiendo. Perdón, es que me muero por verte cada jueves, tal vez eso es lo que me mantuvo tanto tiempo acá. Perdón, pero no puedo resistir por vos, ni por nadie, o lo hago por mí o no lo hago, y así con todo. Y no quiero seguir haciendo esto. No voy a seguir haciendo esto. No me pidas que siga. Tratá de no convencerme, por favor, a veces creo que podrías convencerme de cualquier cosa. Sólo te gusto porque no lográs convencerme. Me gustás, Yang, pero te gusto porque sigo siendo Yin.

miércoles, 27 de abril de 2016

How deep is the ocean?

- Estoy empezando a hacerme a la idea de que no te voy a ver desnuda nunca más. 
- Yo no... no sé. No puedo asegurar eso, pero si te sirve más creer eso está bien.
- Sí, me sirve. 
- Está bien. - Pero no está bien, porque empieza a invadirme el pánico de no verlo nunca más. El pánico generado por todos esos idiotas que antes de él me dijeron algo así, justo antes de decirme que mejor no vernos más. Y puedo tolerarlo de cualquier idiota, pero no de él. De él me mataría escuchar que prefiere no verme más a verme sin tocarme. - Pero me querés igual, no? Me querés -ver- igual, no?
- Sí, obvio que sí. Obvio que sí. No dejás de ser vos por no coger. -Y se me llenan los ojos de lágrimas. Eso es amor, nene. Eso, todo lo demás es lujuria.-Pero tengo que empezar a portarme mejor.
- Te portaste horriblemente mal hoy. 
- Ya sé, me da pena por la otra chica. 
- Supuestamente le sos fiel?
- Supuestamente. Pero me porto tan mal en esta ciudad...-Y lo abrazo.
- Ves? Es eso: Cuando estás con una chica estás dispuesto a cambiar todo lo que sos y todo lo que querés con tal de estar con ella. Y tal vez esta chica quiera eso, no sé. Pero yo nunca, NUNCA, voy a querer que dejes de ser vos y de hacer lo que querés por estar conmigo.
- Ya lo sé, Pau. Ya lo sé. No te pongas mal. - Y se me quiebra la voz.
- Y no podemos volver a estar juntos hasta que entiendas eso...
- Ya lo sé... Ya terminó el reto? (No fue un reto).
- ...Y te amo. Y me alegro mucho de haberte conocido.

- Yo también, Pau. Yo también me alegro. - Y me mira, con unos ojos tan deshechos en amor que es doloroso sostenerle la mirada. Y pienso que siempre es TAN tentador hundirme en ese amor y entregarme porque tal vez nadie me ame tanto como me ama él. Y sé que hacerlo sería egoísta. Porque yo nunca voy a estar tan enamorada de él como él lo está de mí. Y el amor no es egoísta, nunca. Y yo lo amo. Amar y no estar enamorada es la más dolorosa de mis cruces. Al menos no se repite tan seguido como otras. Perdón, nene. Perdón por no poder darte todo lo que te merecés. Perdón por estar convencida de a aterradores ratos de que conocí al amor de mi vida a la misma edad que tenías cuando me conociste a mí. 

domingo, 24 de abril de 2016

"I should have bailed. That little voice had my back. That little voice is older than I am. It’s older than the oldest person who ever lived. I should have listened to that voice."

Ya sabés cómo me pongo los domingos... encontrar a alguien así me arruina la mente y empiezo a tener síndromes de abstinencia cada vez más fuertes y menos espaciados entre sí. Insoportable. Del sábado al jueves pensando en él todo.el.puto.tiempo, y del jueves a hoy semi.deprimida porque no soporto no tener el control. No soporto cuando una persona me gusta tanto como para ponerme así de idiota. Y no me gusta a nivel personalidad, es un taradito. Pero me atrae tan desesperadamente. Y eso hace que él tenga el control de la relación y si algo me pone insoportable y hace que no me tolere es que la persona que me atrae no esté servida en bandeja a mis pies. Es como diezmil veces más divertido e irritante a la vez. Y él es raro, te juro. Que tenga 19 años sólo hace que sea exponencialmente más indignante el no poder sacarle la ficha.
Me hablaron dos locos más en los últimos dos días y están ahí re regalados y yo... pensando en él. Si me gustara personalmente aparte de lo idiota que me pone sólo siendo atractivo, creo que ya me habría ido a tirar de la terraza. O no sé, estaría ahorrando para irme a Barcelona a verlo. (???)
Me agrega un tipo grande que pinta (...), me agrega un pibe chico que juega. Y sí, voy a salir a tomar algo con el jugadorcito. Y debería ver un par de ojos verdes un día de estos, y el finde que viene voy a ir a esa fiesta y claramente va a estar el Rabbithole porque es su banda la que toca, pero no sé si todo eso va a poder contrarrestar mi estado actual.
Empiezo a sospechar que mi estado actual es pánico de repetir la B extrema generada por el Ingenierito cuando fue el pendejito garche liberal perfecto durante meses y después de la nada HOLA, VUELVO CON MI EX.
Como que mi ninfómana interior está saltando en éxtasis escuchando electrónica y mi cerebro está mirandola desde la puerta con una camisa de fuerza evaluando el nivel de daño.
Porque de última cuando me boludean el Dj o Rabbithole son más grandes, soy su grupie, es la ley de la vida. Me lo tomo con toda la paz del mundo. PERO CUANDO ME BOLUDEA UN PENDEJO ME QUIERO MATAR. No creo que sea consciente de que me está boludeando. Ni siquiera estoy segura de que me esté boludeando fuera de mi imaginación.
Alguna vez hablé acá de esa voz? Esa vocecita interna que se encarga de decirme cuándo da estar con alguien y cuándo no, hoy no para de decirme que no es una buena idea con ninguno de los dos chicos nuevos. Y posta esa voz nunca jamás se equivoca. Cuando la ignoro, me va mal. Every.Damn.Time. Esa voz es más vieja que el tiempo y sabe de mí más que yo misma. Algunos la llamarían 'instinto'. Mi instinto me dice que TJ me va a hacer mal. Y que lo bese lo mismo. Que no importa, después pasará. Que lo bese a él y no a los nuevos, que lo busque a él y no a los viejos. Porque lo único peor que que alguien que te gusta te haga mierda es que nadie te guste ni te haga sentir nada. 

lunes, 18 de abril de 2016

"Nene".

- Te odiooo!
- Calmate nenito.
- No me digas 'nenito'. 

Debería saber ya a esta altura que los duros períodos dolorosos de sequía nunca son más que breves y necesarios. Que están ahí para que en contraste las cosas buenas sean mejores. New is always better. Es uno de esos rarísimos casos en los que el apodo real es TAN bueno que da pena ponerle otro acá. 
- Cómo sabés mi nombre? - Me pregunta en mi cama. Su brazo en mi cintura, las piernas enredadas. Sonrío.
- Me lo dijiste anoche, cuando te pregunté por el sobrenombre. Estaba escuchando. - Me mira. Mirada profunda de marihuana. Hace un rato me dijo, casi agotado "Ahora te odio un poco menos..."

- Gracias por escucharme.
Pero se parece a TJ, el protagonista de Recreo, te acordás? Chico lindo, chico problema. Funciona a varios niveles. Y bienvenido, TJ, te extrañaba. Siempre extraño lo nuevo y los principios. Mi pasado y yo tenemos una alta tendencia a repetirnos hasta el hartazgo, y de ella a veces salen experiencias nuevas y memorables. A veces vale la pena, pero siempre termina igual: como la primera vez. 
- Siempre te pinta odiar y besar a la misma gente?
- A veces sólo una de dos. Vos te mereces ambas. 
- Sabes, si seguís tirando chamuyos como ese puede que deje de decirte "Nenito"...

En cambio no hay nada mejor que el primer beso cuando no sabés aún si alguien te gusta lo suficiente. Cuando es bueno, no? Sino es horrible.
Pero cuando es bueno el éxtasis es adictivo. Porque si es bueno en serio podes advertir todo lo que va a venir después y aún así cuando pasa es demasiado. TJ es demasiado. Top 5 worth demasiado. Bienvenido, quedate un rato.
- Me seguís odiando?

- Un poquito, por las dudas... Seguís pensando que soy un nenito?
- Un poquito, por las dudas...
- ...Por fin te sacaste esas botas.

sábado, 16 de abril de 2016

The weight of things.

(19/03) Estoy en un auto a 110 por hora que va a Funes. Me lleva un flaco que conocí hoy y es la primera vez que estoy en ácido y quiero contártelo. Quiero contarte que antes de irme vi a tu chica con mi chico y que es gracioso si sabemos de ellos y ellos nunca de nosotros. Quiero contarte cómo me siento porque estoy en la gloria, todo ese set estuve en la gloria y el celu se está quedando sin batería y no te puedo hablar. Y entonces entiendo que el auto va a 110 por hora en la ruta y me lleva un flaco que está tan en pedo como yo, menos el ácido. Y el flaco me mira. Y yo miro la ruta. Y por un momento sé que me voy a morir acá y no me quiero morir acá y quiero contártelo. Le digo "No tengo ganas de morirme acá", como si la muerte fuera puramente eso, cuestión de ganas. Es sólo algo que no quiero hacer hoy ni ahora, como no quiero estar sobria o dormir. Me dice que esté tranqui, que está atento, le digo que mi primo se va a enojar si encima de matarse me mata a mí también, me dice que a mi primo le jodería más perder el auto para llevar las cosas a los recis. Me río. Y sé que el auto más cercano está muy lejos. Pero igual temo morirme acá y mi celu se apaga en mi mano y no puedo contarte. No puedo contarte que me estoy por morir y entonces entiendo que fuiste lo único en lo que pensé cuando supe que me iba a morir y eso es muy fuerte. Es demasiado fuerte como para decírselo a nadie. Ni siquiera lo puedo publicar si lo escribo. Supe que me iba a morir y pensé en vos. Y ahora estoy viva. Supe que me iba a morir y pensé en vos y sigo viva. Y es muy fuerte hasta para mí saberlo. No sé qué hacer con eso. No sé qué hacer conmigo sobre vos. Tu belleza me supera hasta que duele. 






















(23/03) Mañana viajo a Bs. As. -La versión zorra de todo y de Madrid- y como todas las veces por un instante voy a tener miedo. Y pensando en eso pienso en esto. Ojalá pudiera creer que alguien encontraría esto de pasarme algo. Que te lo haría llegar. Me aterra mi oscuridad, tengo miedo. 

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(16/04) Claramente sobreviví a ambos viajes, Lindo. Y a mi propia oscuridad, lo que cada vez es igual de novedoso. Sigo volviendo a este borrador. La última vez que te hablé me faltó algo, y esa falta duele hasta hoy. Todo lo que hago es para verte. Já. Para estar allá. Pero con vos. No lo admito nunca en voz alta. Ni por escrito. Nunca te admito nada y a veces te sincero todo. Llené de vos mi habitación. De vos y de otros tantos conflictos irresolubles. Las fotos son hermosas. Y llevo días queriendo preguntarte qué opinas sobre la gente que no puede separar mentalmente al Amor del Deseo. Conozco a un chico así. Uno que cree que porque me tiene ganas me quiere, y que porque su amigo no me quiere no me tiene ganas. Quiero saber qué pensas sobre eso. Quiero saber qué pintaste hoy. Quiero saber por qué te extraño, por qué no puedo dejarte ir. Mi amigo hippie me dijo justo antes de partir en uno de esos viajes que sólo hacen los chicos que son algo como vos, que todos los días está triste, y cuando viajaba era más feliz. Y todavía no se fue y ya lo extraño. Le regalé un libro y un dibujo del tamaño de una flor. Una flor como la que me dieron en Madrid. No lo había pensado hasta ahora. Todos los días estoy un poco triste y cuando viajaba era más feliz. Me dijo muchas cosas hermosas como él, como la gente que es algo como vos, y me abrazó viendo estrellas artificiales. Yo logré no llorar. Entrené esa habilidad en tu cama, acá está el registro. Limpiaba tus lágrimas a besos, hace siglos. Tengo miedo de no verte nunca más. Tengo más miedo aún de volver a ver al personaje cuando extrañé tanto tiempo al chico real. Tengo miedo de que no existas por fuera de mi mente y de mi blog. A veces tengo la certeza de que eso es verdad. Hoy tengo la certeza de que eso es verdad. Si no la tuviera te hablaría. Si no la tuviera te estaría escribiendo a vos, y no al interlocutor de todas mis voces. Nada de lo que está escrito acá existe fuera, siento que es importante escribir eso hoy. Siento que debería volver a una de esas camas lo antes posible, si no salgo de mi mente el cansancio me va a matar. Qué se yo, es un chicle, está bueno, no te va a cambiar la vida. Siento que tal vez cuando esté lejos lo voy a amar más que nunca y lo voy a extrañar como a vos. Yo entiendo al Deseo por lo que es: algo que nunca voy a tener que explicarte. Por eso vos y tus hermanos involuntarios son tan importantes.

miércoles, 13 de abril de 2016

Put on your green shoes and dance the blues... ♪

Llego tarde. Llueve, me estoy mojando. Estoy incómoda, estas botas son demasiado grandes. Estoy cansada. La lluvia entre semana me pone de mal humor. Levanto la vista. Hoy todos me aparecen cuando dejo de buscarlos: Una figura de negro con los ojos más verdes del mundo analiza el día lluvioso como considerando que capaz un poco le gusta. Y me ve y sonríe un poco. Le digo a modo de saludo:
- Odio este día, llego tarde a todos lados. 

- Y encima sin paraguas?
- Nunca tengo paraguas. 

Y me saco la capucha y pienso que mi pelo ya era un desastre antes de salir de casa, que hoy todos me encuentran cuando no estoy producida para verlos, ni me siento demasiado yo para hablarles. Estoy insegura e idiota, pero con él no. Él me analiza como considerando que capaz un poco le gusto. Ni siquiera pasa mucho tiempo de charla irrelevante antes de que le diga: 
- Tenemos que hacer algo, porque te extraño. Ponele. - Y una sonrisa irónica.
- Bueeeno. - Y su sonrisa espeja la mía.

- Bah, no te extraño mucho, pero, ponele.
- Jaja bueeeno.
- Pero hoy no porque odio todo. 
- Bueeeno. 
- Me voy porque llego tarde.
- Hablaaamos. 

Un beso de esos en público y adiós. Adoro su obediencia. 
Llego aún más tarde. Llueve más, me sigo mojando. Estoy incómoda, estas botas son enormes. Estoy cansada y aún me faltan dos clases más. Pero ya no me importa. Sonrío. Y durante el resto del camino me pregunto si será abuso o magia que después de tantos llantos me siga haciendo sonreír. Que todavía sea él, de entre todos los encontrados, el que me cambia el humor. 

martes, 29 de marzo de 2016

Nos decimos sin hablar... ♪

Hoy entendí cómo puede pasar. Hoy por primera vez me sentí pertenecer al aterrador Mundo de los Adultos en el que vive la gente de más de treinta años. Fueron apenas unos instantes, pero de golpe entendí con cuánta facilidad se podría en la adultez cometer los mismos errores que cometí siempre, que cometo ahora, pero peores. Lo entendí cuando a través de una vidriera primero creí que estaba alucinando pero sí era él. Cuando corrí media cuadra para llamarlo por su nombre y verlo darse vuelta. Sí era él. Y me miraba. Como si fuera un sueño, como si no creyera del todo que era yo de verdad. Y él y yo no fuimos nada, nadie en la vida del otro, no realmente. Siempre hubo fuego y nada más. Hoy lo veo y es ridículamente lindo, sí, hermoso de cara. Pero ridículamente bajito también. Yo no me equivocaría por él, por él no. Hoy no. Ya no. 
- Cómo está tu chiquita? - Le pregunto.
- Bien, en casa... - Me mira.
- Qué pasa?
- Nada, es que es muy raro volverte a ver. 

Trabajamos en la misma cuadra. 
Lo saludo, con la certeza de que voy a verlo más seguido de ahora en más, porque trabajamos en la misma cuadra. Me voy, me escribe:
"Qué placer verte otra vez." Como en esa canción que me gustaba cuando salía con él, tal vez un poco después. Y entiendo. Entiendo que yo no me equivocaría por él, con él. Su mujer está loca. Su mujer. Muy loca, me amenazó de muerte una vez, hace años. Increíble. Yo salí con ese idiota que tiró su vida así. Y la bebé. Pregunté por su bebé. Pero en su mirada estaba el mismo fuego de siempre. Las mismas ganas. Como si el tiempo no hubiera pasado. Como si fuéramos dos pendejos en las bambalinas de un teatro. Del mismo teatro. En las mismas bambalinas. Y pienso en el otro. Y lo imagino. La misma situación de acá a otros años. Preguntarle: 

- Cómo está tu chiquita? - Y que en sus ojos verdes haya fuego y no me importe. No me importe cómo está. Cómo va a estar. No poder evitarlo. Porque su novia ni siquiera está loca, ni siquiera da miedo. Ni siquiera el riesgo de morir por él. Tan simple como siempre.
Con cuánta facilidad el deseo podría transformarme en una persona terrible. Y ya no adolescente. Ya no confundida. Terrible y adulta. Me asusté. Siempre pensé que mi límite máximo e inamovible sería ese. Esposa e hijos. Si el límite no está ahí, ¿dónde está? 
Últimamente mis límites se derrumban de a pedazos. Estúpida adictiva inmoralidad.
Un día me voy a hartar de ser yo.

domingo, 27 de marzo de 2016

Directo desde el archivo de diálogos imposibles que tuve de verdad.

-  Quiero irme hasta el fin del mundo
- Te acompaño
- Bueno, pero no estás obligada a acompañarme hasta el fin del mundo, podes volver cuando quieras, o irte hacia otro confin del mundo
- Lo se, sólo por eso te acompaño
- Te amo ♥ no se si me comprendes pero te amo igual
- Jaja yo también te amo me comprendas o no


(Spoiler Alert: El diálogo es una metáfora sobre la vida y las relaciones interpersonales).

 (p.d.: Viste que sacaron todos esos candados del Pont des Arts? Entendieron que las artes y el amor se suicidan lentamente si intentan encadenarlos).



sábado, 19 de marzo de 2016

Reservarás un lugar en la Gloria para mí! ♪

Cuando yo no era yo creía en el sexo heterosexual, adulto, fiel, monógamo, con amor. No sé si se entiende: creía -sólo- en eso. El día en que nací, contra la pared de una cocina que no era nuestra me dieron a luz un chico y una chica que me probaron que las cosas podían ser diferentes. Que podían ser... mejores
Antes de empezar a ser yo decía 'Te amo' todo el tiempo, sobre todo cuando no lo sentía. Hasta que una noche, en la cama de un chico que sin tener 20 años ya tenía una adicción a la cocaína, por primera vez lo dije en serio. Ya nunca miento al respecto.
Antes de ser yo creía en la música horrible de los boliches horribles, la que se baila entre gente vacía y sorda. Hoy creo en la Electrónica. La hecha por amigos, la que se baila entre amigos y desconocidos totales. Me culpaba en la fiesta en la que nació esa parte de mí por estar ahí. Me gusta soñar que igual hubiera encontrado el camino a quien soy de no haber ido, aunque tomara más tiempo, porque me gusta ser yo. Pero en verdad soy yo porque tomo esos riesgos. Porque voy a la culpa como las mariposas del témpano van al fuego.
Cuando no era yo apenas creía en el alcohol y en ninguna otra droga. Hoy creo en probar aunque sea una vez todo aquello que pueda darme placer sin matarme, sin matar a alguien más. Eras antes de ser yo comía carne, ¿podés creer? No recuerdo ni cómo se sentía ser esa persona.
No sé si alguna vez creí en los celos. Supongo que sí, son de lo más bajo que tenemos por naturaleza. No recuerdo si alguna vez los defendí. Supongo que sí, no voy a fingir ser tan superior. Supongo que en algún momento de mi vida enuncié que estaba bien celar a la gente. Que era necesario. Prefiero no recordar cómo se sentía ser esa persona.
Supongo que alguna vez fui insegura, y posesiva, triste en general. No soy así ahora.
No era yo cuando no había perdonado los crímenes que perdoné. Aún no había visto a la redención encarnada. Nunca había dormido con los errores irreparables de alguien más.
No era yo cuando no había pisado Europa. Aún no había visto la belleza más absoluta. Nunca había admirado de frente al lado sublime de la Humanidad.
Antes de ser yo era más como el resto, y siéndolo era más y menos feliz. 
En algún punto dejó de darme miedo experimentar. Y en ese punto aprendí a crecer.
Lo hacemos por el morbo.
Y de verdad me gusta ser yo. Si no creyera que es mejor, sería distinta. 
Y de verdad no los entiendo. 
Yo no entiendo a la gente que tiene la chance real y tangible de batir cualquiera con su vida y su juventud y la arruina queriendo seguir el manual. ¿Cuántos años tenemos? ¿No podemos vivir antes de casarnos y reproducirnos acabando para siempre con nuestras vidas y nuestra felicidad? Pero vivir en serio. Yo no entiendo a la gente que camina por el mundo como si no le temiera a la muerte. Como si el tiempo fuera eterno. Como si la belleza y las ganas no duraran un segundo. Yo quiero vivir todo, probar todo, hacerlo por el morbo. Porque puedo, porque la mayoría no lo haría. 
Yo quiero al chico con novia, al amigo de mi chico, a la chica de mi amigo. Los quiero a todos si son bellos, y si son bellas, las quiero a todas también.
Yo quiero el amor y la pasión y la locura. Quiero los viajes. Quiero las fiestas. Quiero aprovechar todo al máximo. Yo tengo todo si quiero, si me dejan.
Cuando me muera no me va a quedar nada que no haya probado y haya querido probar. 
Cuando sea vieja quiero arrepentirme de cosas que hice, no de haberlas dejado sin hacer por miedo. Cuando mire para atrás quiero pensar en el chico de ojos verdes y en cómo dejé de amarlo porque no me alcanzaba su realidad, y lo que es peor, no me alcanzaban sus sueños. 
Cuando esta noche me bese un chico de esos que entendieron lo que es vivir quiero que otro chico entienda que no me conoce. Que no entendió nada de mí. Que sólo soy fiel a mí cuando no le soy fiel a nadie. Que sólo soy yo porque Horacio Brent no me alcanza, porque ya no respiro por su autor, por nadie así. Que lo único que me moviliza es la posibilidad de acumular experiencias. Que no me sirve, si vamos a hacerlo por el noviazgo y la ñoñez, no me sirve. Nunca me va a servir. No mientras sea yo. Mientras sea así cada vez que mire hacia el futuro voy a estar en otras ciudades viviendo nuevas historias. 
Si lo hacemos por las razones por las que todos lo harían, de verdad lindo, no me sirve. Si lo evitamos porque el morbo es demasiado no voy a estar siendo yo.
Y de verdad -de verdad- me gusta ser yo. 
Me gusta mucho más de lo que nunca me va a gustar intentar ser como vos.

lunes, 14 de marzo de 2016

We are not Groupies. Groupies sleep with rockstars because they want to be near someone famous. We are here because of the music, we inspire the music. We are Band Aids.

- A ella no me la vas a presentar, no? - Le pregunta un amigo al verlo histeriquear conmigo.
- Vení boludo, te la presento! - Y lo hace. El amigo se va.
- Que lindo eso de entregarme en bandeja de plata a tus amigos.
- Es la mejor bandeja.
- La próxima deberías consultarme al menos a cuál de tus amigos quiero que me entregues.
- Eso no se pregunta. - Dice el Dj. 

Y recuerdo un diálogo muy lejano:

- Es la persona menos católica del mundo. Es muy inteligente. Sin mencionar fachero.
- Dejá de venderme a tus amigos, R. 
- Na, se vende solo. Jajaja, te estoy jodiendo. 

Pero ese amigo sí se vendía solo, y los amigos del Dj también. Pienso que dijo mal mi nombre. Yo vendería mi alma por una cama con él, pero a veces hasta para mí es demasiado su nivel de vacío. A veces el enojo puede más que las ganas.
Y sé que los dos en verdad son posesivos y celosos, proponen a sus amigos para decir que tienen el control, pero cuando yo me voy les cambia el viaje. 
Hubo una fiesta hace meses en la que escuché tocar al mismo que tocaba en la primera fiesta de esas a la que fui. Creo que él me enamoró de la música electrónica. No será 'el Dj' acá, pero es mi dj preferido. Su banda es la mejor banda local. Y en la fiesta en la que reconocí su música a un piso de distancia, sólo por los bajos, no estaba ahí por él. Cuando lo crucé de frente en el marco de una puerta le dije "Flaco, SOS LO MÁS", pero cuando atinó a besarme me fui. Yo estaba ahí por su amigo, no por él. Siempre por el amigo y no por él. Por el amigo cuando el amigo me dice que está bien entregarme, pero no preguntarme qué opino al respecto. ¿De verdad?
Estoy en la barra a uno de mis amigos de distancia de él. Ya hubo tantas miradas cruzadas mientras bailábamos. Está esperando una cerveza. Le hablo a mis amigos pero lo miro a él.
Y hace horas que espera. Convenzo a mis amigos de ir todos a bailar. Hace décadas, siglos, eras que espera. Y cuando ellos avanzan yo me quedo. Le ofrezco mi vaso. Diciendo:

- Hace demasiado que esperas esa cerveza. - Y responde:
- Vos sos Paulina. - Probando que ningún liker compulsivo de facebook jamás es inocente. 
- Y vos sos el padre de mis hijos electrónicos. - Le digo yo, probando que ningún chamuyo es lo suficientemente idiota como para desactivar a un chico que está lleno de ácido y ya sabía tu nombre sin haberte hablado nunca antes. Se ríe.

Más tarde Hipster Boy y el Dibujante se sientan conmigo en la barra. Intentan hace horas lograr que el barman les venda una cerveza. Agarro el billete de una de sus manos. Me inclino sobre la barra. El barman me vende una cerveza.
- Te odio - Me dicen. Me río. 

Y el Dibujante sale y Hipster Boy está sólo conmigo con alcohol de por medio, como más le gusta estar, y el padre de mis hijos electrónicos sale de un baño cercano y se acerca. Y HB, por una vez, inventa rápido una excusa y se va. Se lo agradezco en silencio. Y una vez solos, el PDMHE encuentra enseguida un momento para besarme. Para bailar conmigo. Para besarme bailando. Y estoy en la gloria. Y el Dj debe habernos visto porque estaba ahí al lado y perdió su sonrisa irresistible. Me pasa por al lado y me mira mal. Tonto. Debe habernos visto también el vecino que hace un rato me hablaba asquerosamente cerca. Mejor.
Bailo y beso y cada tanto vuelvo a mis amigos, lo dejo ir a los suyos. Bailo y beso y cada tanto, vuelvo a sus amigos.
El Dj se apoya en la barra, hace horas que espera una cerveza.
- ¿Siempre tardan años en dar la cerveza en este lugar? - Le sonrío mientras le alcanzo mi vaso, toma un sorbo y por primera vez desde que tengo memorias suyas me mira sin que sus ojos sonrían. Sonrío más. Me llevo el vaso. Vuelvo a bailar y besar. No puedo esperar para siempre.  

No puedo esperar para siempre. Ni hasta la próxima luna llena. Falta demasiado tiempo y quiero aullarle a él. Y salir con su amigo, sí. También. Yo quiero todo. 

Recuerdo en el mismo finde que hay habitaciones hechas a prueba de mí. Con paneles que consumen casi todo el sonido. Recuerdo que había casas así, llenas de basura residual de fiestas acumuladas. Llenas de dibujos y calcomanías y arte. Firmadas de amigos. Mundos aparte. Con la mejor banda de sonido posible. Con gatitos o perros. Con camas en las que nunca nada sale mal. De chicos que nunca duermen. Y toman un montón. Y fuman más.
Y están hechos de sorpresas. 
Recuerdo en fin que había casas que me recordaban al Pintor y a su rabbithole. Rabbithole es un buen nombre, más fácil que PadreDeMisHijosElectrónicos, y kind of resume lo mismo. Puede llamarse así. 

- Qué tal la ciudad de las luces? - Le pregunto al Pintor.
- Muy bien, enamorado de este sitio. Hoy me robé una taza del Louvre. Anoche hablando con unas chicas fui a una fiesta, pasaban techno. - Me río. (¿Quién más que él roba ahí?)
- N
o tenes arreglo. Que geniaal. Yo anoche fui a drogarme y coger con Rabbithole. - Se ríe mucho más.
- V
os hdp no tenes arreglo. Rabbithole me cae bien.

No tenemos arreglo, posta, él y yo. 

Me dice que no deberíamos salir más el chico con el que teóricamente no salía. Y está bien, qué se yo. Mandé un mensaje a las 2:10 am el sábado, decía: "No nací para la fidelidad chicos. Nací para fisurar con dj's y coger drogada." y en ese momento, como en tantos otros, era cierto.

viernes, 11 de marzo de 2016

I'm not choosing.

Jake: Man, do I love you.
Olivia: I want Vermont with Fitz. 
Jake: Oh, okay. 
Olivia: I also want the sun with you. 
Jake: So...
Olivia: I'm not choosing. I'm not choosing Jake. I'm not choosing Fitz. I'm choosing me. I'm choosing Olivia. And right now, Olivia is dancing. Now, you can dance with me or you can get off my dance floor. I'm fine dancing alone.



miércoles, 9 de marzo de 2016

I took you for granted, I took fate as a rule ♪

-No había visto tu facebook lleno de trabajos nuevos. Te admiro de una forma que de a ratos es más fuerte que el amor. Tus dibujos me dan ganas de llorar.

Hoy tuve una entrevista en un restaurante de alta cocina cuyo nombre está en catalán. ¿No era eso un buen augurio, nene? Pero cuando quiero demasiado algo entro en peligro de autodestruirme. Soy tan buena para la autodestrucción. Vivir dentro mío es agotador. Si amo vomitar y amo el alcohol y odio vomitar y alcoholizarme. Voy a tener que dejarlo por un tiempo en serio si pretendo decir con honestidad que no tengo un problema. Y en mi mente no termino de separar el hecho de que la entrevista haya resultado ser para trabajar en otro lugar, del hecho de haberme embriagado tanto anoche. Ni siquiera me fue mal, superé el mareo y las nauseas, la presión baja y los nervios. Fui hecha una diosa, no, me fue bien. Siempre me va bien. En apariencia al menos, en los números de la libreta. En mí no tanto. Hubo tantos momentos a lo largo de la noche en los que pensé 'Debería irme a cenar y dormir.' y no lo hice. Una y otra vez no lo hice. Y sólo la última parte tal vez se justifica, tal vez es lo peor. Estaba en la más mítica terraza con un chico que me encanta. Me encanta. Y hace rato que nadie me encanta así. Y es un bobo, sí, un vago, ya lo sé. Y tiene novia, y su novia me cae tanto mejor que él. Pero es lindo. Lindo de una forma rara y está loco. Loco de una forma rara y tiene talento. Y ya sabemos como soy hacia el talento. Como nunca puedo resistirme. Me resistí, igual. Porque no quiero ser la chica que hace las cosas mal siempre. Quiero a veces, de vez en cuando, en al menos un aspecto de mi vida no hacer las cosas mal del todo. Y entonces no consigo el trabajo ideal en la cocina catalana, supongo. Por ahora al menos no. Y no salgo con el chico disponible que sólo puede hacerme bien, supongo. Por ahora al menos no. Empiezo tal vez a resignarme a otras opciones. A pactar. Porque en verdad quiero hacer todo, siempre todo. Porque en verdad quiero volver a vos. A una habitación llena de tus pinturas y papeles. A que el amor no sea necesario y el dolor esté igual porque la admiración puede ser  igual de fuerte. De todos mis locos lindos talentosos (mirá que son muchos), siempre el mejor. Y hoy cumplen años todas esas Fs que me complicaron el año. Pero estoy tranquila porque tus dibujos me dan ganas de llorar. 
Y llorar me hacía falta, lindo.


Todos de a pedazos en una canción.

domingo, 28 de febrero de 2016

Soy tu admirador pero no tengo principios. Necesito, después de ver, poder tocar ♪

Cuando un flaco te cancela y te alivias te das cuenta de que estás haciendo las cosas como el orto. No es justo que yo siempre te zafe de tu realidad pero vos nunca estés ahí para mí cuando yo miro a la puta Felicidad de cerca y me empiezo a quedar sin puertas por las cuales escaparme. Deberíamos tener una palabra clave o algo, un código rojo. Para cuando no sean simples ganas, para cuando sea una emergencia. Bleh, ¿cuándo fue justo lo nuestro? Y sé que sos de lo único que podría salvarme en este momento. El Artista no va a alcanzar, o ninguno de los otros. Y el Pintor está tan lejos... no más lejos que vos, para el caso. Tal vez incluso más cerca. Tal vez una palabra suya podría surtir ese efecto tan necesario. Una palabra suya casi siempre me salva. Y sé que el Bicho está viniendo, casi acá, pero no puedo usarlo a él. A él no, nunca, lo amo demasiado. No debería desperdiciar a las nuevas adquisiciones en desquites ajenos tampoco. No sé con quién sacarme este dolor. Que no seas vos. Ni él, claro. Obvio. Y el Ingenierito se conecta en cuanto pienso en él. Porque sí, él y yo sabemos que todo esto es su culpa. Nunca duran esos pocos que no piden nada de mí. Nunca tengo tiempo de acostumbrarme a la idea de darles todo. Nunca quiero darles todo a los demás. Y ni hablemos del Dj, Dios, ni hablemos del Dj. (Djos). Volví demasiado rápido de mi retiro forzoso. Volví para tener que lavar 500 platos sucios, es la metáfora perfecta. 
- Con eso compenso todo?
- Siempre. 

Y ojalá no fuera así. 

El Artista va a tener que bastar. Como a veces yo le basto sin ser suficiente. 

Le pido que me salve la vida esta noche, promete no hablar y me hace reír. 
La verdad más profunda es que la felicidad no me parece más importante que la libertad. 
La verdad es que no quiero tener una sin la otra. 

Le regalé Kid A en un link al Pintor para su cumpleaños aproximado. 
Le dije cuán aburrida es Rosario sin él, porque él sabía donde estaba lo importante. Me dijo:
Como para evitar conceptos sobre el amor, que el sexo no sea una escapatoria o algo con que conformarte. Porque te vuelve un mal amante, y el sexo creo yo que es para amantes.
Y tiene razón, como siempre. Esta noche tal vez sea mala amante. Pero ey, siempre supe disfrazarme de la mejor. 

Y al final hasta el Artista me falla. Y él nunca me falla, not really. Y ya fallaron todos los demás. En formas tan... obvias. Alevosamente obvias. Divinamente obvias. Odio a mis dioses. Al Universo. Al Destino. A la Ciudad.

- Odio cuando todo se confabula en mi contra para que tenga que resolver mis problemas de formas maduras. Bleh, mueranse.
- A veces sucede. Perdón por decir que sí primero, es que lo dijiste de una forma muy tentadora.
- No lo suficiente al parecer. 

Nunca es lo suficientemente tentador como para desafiar a los dioses. Todo el que los perciba aún ínfimamente lo sabe aunque no lo sepa. Ni siquiera yo puedo. Nunca pude, y son míos. Yo no puedo contra la verdad, la llevo dentro. Y mis dioses nunca mienten. 

miércoles, 27 de enero de 2016

Your head will collapse, but there's nothing in it, and you'll ask yourself...♪

Me mira con esos ojos increíblemente verdes acostado en mi cama, de frente a mí. Le digo ''Que lindo que sos.' Me pregunta 'Qué me estás diciendo?'. Le respondo "La verdad. La última vez que nos vimos no estabas tan lindo." (esa fue hace un mes). 
Me doy cuenta -no sin sorpresa- de que hace tres años que estoy con este pibe. Con idas y venidas y amor y desamor de por medio. Con peleas y reconciliaciones. Con declaraciones sinceras de todo tipo. Con interrupciones... con su novia. Con mis chicos. Con entradas incontables de este blog. Pero tres años. Creo que se puede decir que es la relación más larga que tuve en mi vida. Me pide una y otra vez que me case con él en Europa. "Casate conmigo en España." Si fuera a España a casarme sólo por una ciudadanía... ¿sería con él? No sé a cuál de los dos prefiero deberle algo. 
Me mira con esos ojos y pienso que en este instante -principio de año- todo parece estar yendo increíblemente bien. Me llaman a entrevistas de trabajo y me vuelven a llamar y creo que voy a poder conseguir esto, y que si trabajo por el tiempo suficiente voy a poder irme a Europa este año. Voy a poder verlo de nuevo este año. Y mi idiota de ojos verdes hoy por primera vez subió a una casa a una fiesta a la que no estaba realmente invitado para quedarse conmigo a la vista de todos. Y mi chico.... mi toy boy, al que no me tomaba en serio en su momento, ha demostrado darme una relación tan perfecta... con él soy libre. Somos libres. Nos gusta esa libertad, no la cambiaríamos por casi casi nada. 

Pero pasan dos semanas, y lo cambia. Justo después de ese viaje en auto en el que nos fugamos del mundo a una casa sola y lejana. Justo después de decirnos mutuamente que no iba a poder ser así de bueno con alguien más muy fácilmente. Justo después de que fuera... increíble. Lo cambia por algo más. Me cambia por alguien más. Y ni siquiera es alguien nuevo, si fuera alguien nuevo estaría feliz por él. Su único defecto es ser tan romántico empedernido como yo.... pero no es alguien nuevo. Es la misma mina de la que se quejaba hace nada de tiempo. Y elije un momento tan excelente que no sólo me está dejando él, sino que el chico de ojos verdes, como todos los demás, está fuera del país. Y me duele. Dejé que el pibito me doliera. Sin enamorarme nunca, sin darle nunca la chance de enamorarse de mí... me duele igual. Y no tengo noticias de esos trabajos. Y tal vez pasen los días y se conviertan en semanas, meses sin trabajar. Y cuando menos lo espere voy a estar pensando de nuevo que tal vez Europa 2017 sí va a ser posible. 
No quiero esperar. No quiero dejar de estar con él. No quiero dejar de estar con gente. No quiero que me sigan dejando por la novia o Barcelona o la ex. Quiero poder escribir en este mismo borrador 'Todo va bien.' sin miedo a quemarme. Sin miedo a prender fuego con mi ingenua esperanza todo lo bueno que podría llegar a venir.
No quiero las caras de los que me dejaron entre los cuadraditos del chat. No quiero que existan en mi campo visual cuando ya se fueron de mí. 
Y quiero, como todos los días, estar allá. O al menos sintiendo que estoy por estar allá. 
No quiero estar más acá. Rosario me contamina. Recuerdo que alguna vez la amé, then again, hace un rato creía que todo iba bien. Ciudad Suicida. Estoy cansada. Cansada del calor que me impide bailar, de la humedad, de respirar mal y de tener el pelo feo. Cansada de no poder salir sin oler basura y escuchar gritos y ver... gris. Cansada de ser yo y de que nada bueno dure nunca más que un rato. Quiero al pibito, lo quiero conmigo haciéndome feliz, siendo fácil. Quiero el trabajo, el que pague mejor, los dos incluso. Quiero Barcelona. Quiero su risa. Quiero dejar de querer cosas y empezar a tenerlas, por una vez. Quiero no tener que decidir en este momento con quién me desagrada menos la idea de tener sexo por bronca. Estoy tan cansada de.... todo. Otra vez. Como siempre.