domingo, 20 de julio de 2014

Are you somewhere feeling lonely, or is someone loving you? ♪

Mamá pasó 10 días viajando. Conclusiones al respecto de mi vida en soledad:

Cocinar. Lavar platos. Ordenar platos. Tirar basura. Sacar basura. Reponer bolsas. Separar ropa sucia. Lavar ropa. Colgar ropa. Descolgar ropa. Ordenar ropa. Ordenar habitaciones. Limpiar habitaciones. Hacer camas. Abrir ventanas. Abrir cortinas. Cerrar ventanas. Cerrar cortinas.  Alimentar al perro. Cambiar el agua del perro. Limpiar lo que ensucia el perro. Sacar a pasear al perro. Jugar con el perro. Juntar los juguetes del perro. Trabajar. Ir a clases. Hacer compras. Administrar plata. Pagar cuentas... 
...yo puedo con todo eso.

La parte madura y adulta de vivir sola no es problema para mí. La mayoría de esas tareas incluso me gustan. Me gusta crear orden y mantenerlo. Tener todo obsesivamente prolijo es parte de mí, me sale con más naturalidad que dejar las cosas sucias o desordenadas. 

Incluso cuando ocurren cosas por fuera de lo habitual -los accidentes, los imprevistos, las fallas de infraestructura- encuentro la forma de manejarlas, sé a quién llamar y más o menos cómo actuar al respecto. Sí, yo puedo con eso.

Lo que me supera es la parte infantil e inmadura de vivir sola. 

Las puertas abiertas, la oscuridad, las maderas que crujen, las sombras, el decidir a qué lado de la habitación le doy la espalda cuando duermo, los espejos vistos de reojo, los fantasmas, los monstruos, los asesinos seriales que de seguro se esconden detrás de cada esquina o adentro de algún ropero. Me supera en fin, la soledad.

Muchas veces pienso que me encantaría vivir sola, tener mi propio lugar, decorado a mi modo, regido por mí... pero no sé si podría con eso ahora. Ahora es cierto, tenía a casi todos mis amigos lejos, sino capaz hubiera sido distinto... pero en el fondo lo diario y cotidiano pesa lo mismo, con o sin amigos en la ciudad. 
Es mucho más liviano gracias al perro... vivir solo y sin mascotas debe ser mucho peor. Pero el perro no habla y su capacidad para protegerme contra los males del mundo está limitada por sus 3,5kg de peso. 

No sé cómo hace la gente que vive sola para dejar de tener esa clase de miedos... no sé si en realidad lo hacen. Supongo que en el fondo no, por algo el género de terror tiene tanto éxito en la industria del cine. Supongo que nadie puede librarse de su propia imaginación... al menos no la gente que brilla, vive y piensa. 

Supongo que los miedos más oscuros y peligrosos viven en nuestras propias mentes y los llevamos a todos lados, estemos acompañados o no.
Pero algunas cosas todavía pueden apaciguarlos y ayudarnos a hacerles frente.
Al menos en mi caso, (aparte del perro), esas cosas suelen ser:
- La música.
- El chocolate. 
- Mi celular. 
- Los libros. 
- La tele.
...y mamá. 
Por sobre todas las cosas, mamá.  


miércoles, 9 de julio de 2014

Ma voglio viverla così quest'avventura senza frontiere e con il cuore in gola... ♪

Yo:
Sabés, estoy rota las bolas de que los flacos actúen para conmigo... pretty much como estás actuando vos. Ese mensaje, después la disculpa, el pedido de vernos en persona para aclarar cosas... 
Al principio hace unos años no sé si estaba bueno pero se confundía con ser... hay alguna palabra buena en español para flattering? Al principio me hacía sentir linda, o deseada, etc. Pero después flaco tras flaco veo las mismas cosas y estoy re cansada. 
No sé bien cómo ponerlo en palabras... sé que soy una mina atractiva, que va más allá de lo físico, no soy ni totalmente fea ni totalmente linda, pero sé que atraigo capaz porque tal cual lo que decís del Bar, actúo como si fuera atractiva. Histeriqueo por naturaleza. Pero ya ni siquiera hago eso con la gente nueva que conozco... ahora me cuido de cada palabra o movimiento que hago.  
Con vos me sale histeriquear por inercia, porque sí, vos también me histeriqueas por inercia. 
Y sé que aparte de ser atractiva tengo gustos, intereses, ideas que no suelen ser muy comunes de encontrar en una mina. 
Entonces lo que pasa todas las veces es que conozco a alguien nuevo, o me acerco a un conocido que antes no era muy cercano, y tengo charlas interesantes, y me río mucho, y puedo salir sola con él, y pasarla re bien... y le termino gustando. Y en realidad no le gusto yo, porque cuando me entreve a MÍ posta en realidad le genera rechazo o miedo y no le gusta, pero la idea platónica sí. 
Y entonces espera que yo no actúe ni hable como yo, sino como su versión platónica de mí. Espera que me haga cargo del hecho de que le gusto. Espera que sea más que una amiga. 
Y capaz si el flaco me atrae también me lo puedo chapar o algo, pero yo.posta no por eso me voy a enamorar ni nada... yo.platónica tengo como la obligación de corresponder sentimientos en la mente del flaco. 
Y a mí me importa el flaco. O me interesa ser su amiga, o mantenerlo en mi vida. Así que me termino rindiendo a una relación que sea el punto medio enfermizo entre lo que yo quiero y lo que él espera... una especie de no estar saliendo nunca como pareja, pero no poder ser amigos normales... eso es lo que me pasó con vos. Y con el Rockabilly. Y con Supertramp. 
Con el Nerd o el de dibujo no porque ellos no me atraen a mí... pero hace rato que siempre es así en menor o mayor medida. 
Es injusto para mí. 
Te quiero. Y te extraño. Y te necesito en mi vida cuando no estás, aunque no me de cuenta a diario, a veces me pega la falta de vos. Y a veces me gustás. Pero vos sí sos vos para mí. Yo te quiero en mi vida por lo que sos. Y te extraño por lo que sos. 
Vos, como todos los otros flacos, extrañás y necesitas de mí solo lo que platonizas y lo que no podés tener... si soy solo yo... si lo que puedo ofrecerte es lo que SOY yo... no te interesa. Decís que no te lo bancás, que no podés ser mi amigo, y te alejás. 
Y no sos el primero que lo hace, pero probablemente sos el que más me duele porque me convenciste siempre de que vos eras la víctima y yo era la mala. Y me convencí siempre de que sos el único flaco cuyo bienestar me interesó más que la posibilidad de no sé, acostarme con él más allá de sus sentimientos. 
No digo que yo haya sido super inocente, o que haya hecho las cosas bien, sé que sí te lastimé realmente en más de una ocasión... pero yo al menos siempre fui, siempre soy, siempre voy a ser sincera. 
Y, sinceramente, cuando vos y los otros actúan como actúan hacia mí, me siento una muñeca. Algo que pueden usar, y admirar, y tirar después como si estuviera vacío por dentro. 
Me duele que a vos no te interese a menos que estemos juntos y te sea fiel y sea tuya. 
Me duele que a nadie nunca le interese a menos que sea así. No es justo para mí.

Hipster Boy:
Estoy hace 20 minutos leyendo la pantalla como un pelotudo cuando lo único que quiero hacer es abrazarte, boluda.
Me hace sentir muy estúpido pensar que siempre quise tratar de ser diferente para vos y termino en la misma, pero no sé, tampoco voy a cambiar lo que dije porque es lo que siento.

Yo:

Sí... si no te sale ser mi amigo no puedo hacer nada contra eso. Así como vos sentís/sabés que podrías ser un buen novio para mí si te diera la chance, yo sé que podría ser una buena amiga para vos si me dejaras. 
Pero no sé... a mí no me sale ser tu novia, y a vos no te sale ser mi amigo.
Lo podemos intentar o fingir, pero no es lo que nos sale por instinto.
Sé que al menos yo odio ir en contra de mis instintos.

H.B.:

Yo nunca confío en los míos...
Dame tiempo.
Sé que nos vamos a volver a ver, no sé cuando...

Yo:

Capaz simplemente no nos sale tener ninguna relación X porque nunca es la que los dos queremos.
Capaz sí es mejor -o menos peor- que no hablemos más ni nada... 
Lo que me cansa es que creas que tu sentimiento hacia mí importa más que el mío hacia vos. 
...asumo que la necesidad de abrazarme tiene que ver con cierta realización al respecto de ese último punto (?)

H.B.:

No sé si es realización o no, me estás diciendo que te angustia esa situación y siento que no puedo hacer nada (porque a pesar que no confíe en mis impulsos, nunca puedo traicionar mis sentimientos).
Bueno, capaz que sí, me faltaba tu parte.
Te debo un abrazo para el futuro...

Yo:

Yo ya no te debo un café.

H.B.:

Esta vez prefiero deberte algo yo a que sea al revés.


Lo que me gusta del fútbol es que siempre ofrece la posibilidad de un final épico inesperado, o de una derrota honrosa. Sabés que si te despegás de la pantalla siempre puede ocurrir algún giro magistral que cambie el destino de las cosas... en la vida casi nunca pasa eso. 
En la vida lo más común es que se repita una y otra vez la misma historia, sin llegar a terminarse nunca, sin ofrecer un cierre satisfactorio. Aunque cambien los jugadores las cosas nunca se resuelven en la vida real después de un límite de tiempo. 
Y por muy bien que hayas jugado, en la vida las derrotas casi siempre son amargas.